Boardwalk Empire: De lo nuevo, lo mejor.

No podía ser de otra forma, “Boardwalk Empire”, la última gran producción de la cadena HBO (donde siempre ha destacado por sus series de calidad) ha cumplido sobradamente las expectativas del público y la crítica.

Con la producción de nada más y nada menos que Martin Scorsese, y después de 4 episodios ya emitidos, solo puedo tener palabras de elogio para la serie estrella de la nueva temporada….eso si, con el permiso de “The Walking Dead”, que viene pisando fuerte con una campaña de promoción jamás vista antes en una serie.

“Boardwalk Empire” nos sitúa en los años 20, es una época de ley seca en los Estados Unidos y donde el auge de las mafias ya es una realidad.

La acción se traslada concretamente en la ciudad de Atlantic City, donde el político Nucky Thompson (Steve Buscemi) es dueño absoluto de todo lo que ocurre en ella.

Como “buen” político que se precie, Nucky tiene dos caras bien diferenciadas, una para sus conciudadanos donde goza de una gran popularidad debido a sus constantes aportaciones de caridad y servicios a la comunidad, y otra bien distinta con su círculo de amistades más cercano, la de mafioso, donde el único objetivo que tiene es claro, hacer dinero a cualquier precio. Y ahí es donde empiezan los problemas para el bueno (o malo, según se mire) de Nucky.

Sin duda lo mejor de la serie es su puesta en escena, sencillamente espectacular.

Decorados, ambientación, vestuario…todo cuidado al detalle para transmitirnos con la mayor fidelidad los clichés típicos de la época.

Gracias a esto podremos ver claramente las diferencias de clase social, las fiestas en cabarets y casinos, la corrupción, el constante derroche de los magnates, y que como no podía ser de otra forma, estarán rodeados por 3 o 4 mujeres de buen ver en busca de ser la elegida por el ricachón de turno, y éste le ofrezca una vida llena de lujos y placeres.

La historia recae en los hombros del personaje de Nucky, pero a su alrededor podemos encontrar personajes ( con alguna que otra gran sorpresa ) muy bien definidos, eso si, sin llegar a transmitirnos la fuerza que tiene el personaje de Steve Buscemi, que lo borda en su papel.

Este es uno de los primeros escollos que se pueden encontrar en la serie, debido al gran número de personajes, en un principio puede llevar a la confusión porque realmente no sabes quien es quien, ( incluso en el episodio piloto hay un guiño hacia el espectador en referencia a esto último), pero evidentemente se va subsanando a medida que avanza la serie.

La serie tiene pinta de convertirse en serie de culto, de entrada las sensaciones son inmejorables, y basta decir que ya ha pasado con creces su primer gran obstáculo, convencer a la audiencia ganándose una merecida renovación para una 2º temporada.

Y destaco esto, porque hoy en día, los datos de las audiencias son más implacables que nunca, ya que pueden llegar a provocar cancelaciones de series con tan solo 2 episodios emitidos, como ocurrió con “Lone Star” y “Outlaw”.

“Boardwalk Empire” es de visión obligada para quien le guste el género, y como no, para los que busquen una serie de calidad en una temporada de otoño donde no ha habido grandes estrenos en dramas, solo “The Event” se salvaría de la quema general.