Huelga General, pánico en el plató

Un día como hoy recordamos que entre el 5 de Noviembre de 2007 y el 12 de Febrero de 2008 se dio un hito histórico en la industria del otro lado del charco, la huelga de guionistas. Saltaron a la palestra los Gremios de escritores de América de ambas costas, la del Este (WGAE) y la del Oeste (WGAW), paralizando las producciones tanto de programas de emisión diaria como de series semanales, y es que la televisión se había quedado sin palabras. Muchos fueron los damnificados, nosotros nos centraremos en la realidad catódica, en aquellas series que echaron el cierre o vieron afectada su calidad por la huelga de esos creativos que rellenan tantos minutos de la pequeña pantalla.

Héroes (NBC), una serie de ciencia ficción creada por Tim Kring, que arrancó con fuerza de la mano de una T1 envidiable, marinando miles de adeptos que configuraron un fandom que ha sobrevivió incluso a la cancelación de las aventuras de los hermanos Petrelli y de la animadora que salvaría el mundo, también padeció en primera persona la temida huelga de guionistas. No sabemos qué habría sucedido si este acontecimiento no hubiese tenido lugar, quizá en una realidad alternativa tipo Fringe la serie del eslogan «save the cheerleader, save the world» continúe su emisión; pero en nuestro mundo fuimos testigos de una de las temporadas más soporíferas de las últimas décadas.

El regreso de estos héroes con habilidades espontáneas fue un fracaso, la audiencia le dio la espalda paulatinamente durante la T2, y es que el guión sobre los hermanos Herrera, la amnesia de Peter, las desventuras samuráis de Hiro y un argumento desubicado hicieron mella hasta en la crítica, que no dudó en despellejar a la que había sido la niña de sus ojos la temporada anterior. Además también fue cancelada su precuela, Heroes: origins, cuya grabación estaba prevista para ser emitida como puente entre la T2 y la T3. El caso es que Héroes agonizó hasta una cuarta temporada que ya pocos recuerdan porque no la vio ni la familia del elenco protagonista, su punto final data del 8 de Febrero de 2010.

Algo parecido sucedió con Prison Break, la que fuera la joya de la corona de la FOX, que malvivió hasta una T4 ya irreconocible. La huelga de guionistas coincidió con la tercera temporada, con ese subproducto carcelario que tuvo lugar en Panamá, en una prisión llamada Sona.

Uno de los alicientes de la producción de Paul Scheuring fue la historia de amor entre la doctora Tancredi y el convicto Scofield, y es que la joven Sara llegó a perder la cabeza por Michael en esta T3, pero no literalmente como nos quisieron hacer creer los guionistas, sí, sí, ésos que estaban en huelga. La verdad es que rescataron al personaje para la última temporada porque sin ella los datos de audiencia no cuadraban, aún así, se cayeron de la parrilla el 22 de Mayo de 2009. Aunque el chico de los tatuajes tuvo un final algo más «digno» que Sylar y compañía, ya que rodaron una película de 90 minutos a modo de despedida.

También en la cadena FOX emitieron fugazmente una serie que permaneció en antena 8 capítulos, New Amsterdam. El título puede que no os diga nada porque presumiblemente esta redacción suponía el 50% de su audiencia. Se presentó sin grandes pretensiones, y se marchó del mismo modo, con poco ruido y, por qué no decirlo, pocas nueces, y es lo mejor de la serie era la sinopsis, la ambientación y la foto «del antes y del después» de varios lugares de Nueva York.

Quizá le faltó tiempo, su estreno se apresuró para rellenar los vacíos de la huelga de guionistas y este hecho se reflejó en el argumento de los capítulos autoconclusivos que se sucedían casi por inercia más que por tener algo que contar; lo más original era esa habilidad tan entrañable que le habían otorgado los indios de una tribu al protagonista, la inmortalidad. Pero todo su ying tiene su yang, así que si encontraba su alma gemela volvería a ser mortal, y así lo hizo, en la estación de metro, Amsterdam se topa con su media naranja y comienza a notar los síntomas de la edad, una edad que ronda ya los 400 años. Hasta aquí lo novedoso, lo intrigante, luego se encadenaban los argumentos episódicos sobre las investigaciones policiales del protagonista que no hacían más que ralentizar el ritmo de la serie.

Otros ejemplos: Pushing Daisies –Criando malvas en España- nos endulzó durante 2 temporadas en la cadena ABC, The reaper se mantuvo también 2 temporadas (The CW), pero finalmente la huelga de guionistas… las silenció para siempre.

imágenes: elpais.com / fansprisonbreak.blogspot.com / experinciapersonal.es