La 70ª gala de los Premios Emmy llegaba a su fin y ‘Juego de Tronos’ solo había ganado uno de los seis premios a los que aspiraba, el de mejor actor secundario para Peter Dinklage. Todavía quedaba el gordo, el que toda cadena o plataforma quiere llevarse a casa, el premio para la mejor serie de drama. Las quinielas apuntaban a que este año ‘The Handmaid’s Tale’ (‘El Cuento de la Criada’ para España) se alzaría con el premio, sirviendo este pretexto como uno de los enfrentamientos de la noche, pero finalmente fue ‘Juego de Tronos’ la que ganaba una vez más este Premio Emmy convirtiéndola en una de las mejores series de todos los tiempos. Estamos ante la serie más premiada en la historia de los Emmy con 47 premios en su poder.
Sin duda alguna, lo que ha caracterizado esta edición de los Premios Emmy es que era el año de las plataformas. Netflix aspiraba a 112 premios, teniendo por primera vez en su historia más nominaciones que ninguna otra, mientras que HBO, por su lado, alcanzaba las 108 nominaciones. Esta fue sin duda la segunda gran rivalidad de la noche. Las plataformas están en su mejor momento y si no que se lo digan a Amazon Prime Video, que con su serie ‘La maravillosa Señora Maisel’ se llevó nada más y nada menos que ocho estatuillas de las que optaba en el apartado de comedia, la más premiada de toda la gala. Entre todos los premios cabe destacar que cinco de ellos fueron de los más importantes: Mejor Serie, Mejor Actriz Protagonista, Mejor Actriz Secundaria, Mejor Dirección y Mejor Guión.
Seguramente otro de los momentos que será más recordados de esta gala ha sido cuando el director Glenn Weiss daba el discurso por el Premio Emmy a Mejor dirección de un especial de variedades. Hasta aquí todo parecía que iba a ser un discurso más para un premio que no levantaba muchas expectativas. Lo que nadie esperaba es que, tras dedicar el premio a la memoria de su madre recientemente fallecida, el director fuera a pedir matrimonio en directo a su pareja, recibiendo una inmensa ovación por los allí presentes. De este modo y delante de medio mundo, su novia se convirtió en su prometida para la doble felicidad de Glenn Weiss.
Dos de nuestros actores más internacionales, como se suele decir, también estaban nominados. Penélope Cruz luchaba por llevarse consigo esa noche el premio a mejor actriz secundaria por una serie limitada o película por su papel en ‘The Assassination of Gianni Versace: American Crime Story’, sin embargo, el Emmy fue a parar a manos de Merritt Wever por el wéstern femenino de Netflix ‘Godless’. Tampoco pudo ser para Antonio Banderas, que se quedó con las manos vacías por su nominación a mejor actor por una serie limitada o película por su papel en ‘Genius: Picasso’. Esta vez el premio se lo llevó Darren Criss por su actuación en ‘The Assasination of Gianni Versace: American Crime Story’).