«Luther», en la mente de un asesino.

Después de la magnífica impresión que me dejó la miniserie “Sherlock”, uno de los últimos éxitos de la cadena británica BBC, he tenido la oportunidad de visionar otro de sus proyectos emitidos durante este 2010, se trata de “Luther”, un drama policial en forma de miniserie que consta de 6 episodios y cuyas impresiones dejo a continuación.

La serie nos sitúa en la Londres actual y nos narra las peripecias de John Luther (Idris Elba), un inspector de policía brillante, inteligente y con una gran capacidad de deducción, pero también es un tipo obsesivo, con problemas emocionales e incluso en ocasiones, mentalmente desequilibrado. Eso hará que sus formas no sean las más apropiadas a la hora de resolver los casos y le traerán más de un problema tanto en lo profesional como en lo personal, ya que su matrimonio con su esposa Zoe se viene abajo. En los minutos iniciales del primer episodio vemos precisamente como Luther lleva su faceta más oscura al límite, por lo que es apartado del cuerpo. Pero la suerte no le abandona y debido a que asuntos internos, por el momento, no puede avanzar en su investigación contra John Luther, éste es readmitido en el cuerpo de policía dispuesto a seguir haciendo lo que mejor sabe hacer, atrapar asesinos en serie.

En el inicio de cada episodio se nos muestra el rostro del asesino, el objetivo de la serie no es que el espectador permanezca intrigado por descubrir y saber quien es el culpable, no, de eso ya se encarga John Luther. El objetivo de la serie es algo más profundo, en “Luther” veremos la lucha psicológica entre John y los asesinos de turno, el pensar más y mejor que el rival será una constante a lo largo de seis episodios, seremos testigos de la tremenda frialdad con la que un asesino es capaz de pensar y ejecutar sus atrocidades, y esto es precisamente uno de los puntos fuertes de la serie, porque una cosa es identificar al asesino y otra, no menos complicada, es demostrar que realmente lo es. Además, la serie también nos muestra lo frágil que puede llegar a ser la mente humana ante situaciones traumáticas o desesperadas y las fatales consecuencias que pueden generar. Cada episodio tratará sobre un caso en concreto, pero ya en el inicial, John Luther se las tendrá que ver con Alice Morgan (Ruth Wilson), una mente oscura pero tan brillante como la suya.

El creador de la serie, Neil Cross, comentó que para el personaje de John Luther se había inspirado en los personajes de Sherlock Holmes y Colombo, según sus palabras, del primero coge esa capacidad deductiva y del segundo la manera de saltarse protocolos policiales con tal de conseguir su objetivo principal. Un personaje, que dicho sea de paso, esta perfectamente interpretado por Idris Elba (“The Wire”), tanto en los momentos de contrariedad por las situaciones que debe soportar, como cuando debe mostrarse firme delante del criminal. Eso si, realmente el personaje que sorprende es el de Alice Morgan, la actriz Ruth Wilson (“The Prisioner”) esta impecable y convincente en cada una de sus apariciones, sólo con verle el rostro, ya se puede apreciar que realmente es un personaje temible y, sin duda, sus diálogos con Luther son de lo mejor de la serie. Destacar también el gran acierto de casting y el nivel interpretativo de cada uno de los actores que toman el papel de asesinos, todos ellos a un nivel extraordinario, mención especial sobretodo al del episodio 4, realmente brutal.

El guión es realmente bueno en cada uno de los  casos, ya que en todos ellos se nos muestra un perfil distinto por cada uno de los asesinos que intervienen, así pues, sus modus operandi cambian en cada caso, gracias a esto, tendremos la oportunidad de ver entre otros, al asesino frío y despiadado, pasando por el enfermizo y fetichista o por el perturbado sexual sumido en una locura irreversible. Junto a las tramas principales, también tendremos unas subtramas enfocadas en el ámbito personal de Luther, tanto con su mujer Zoe, a la que intenta recuperar, como con su extraña relación con Alice, cuya admiración compulsiva por Luther va en aumento a medida que transcurren los episodios. Todo esto sin olvidar el acoso al que será sometido John, por parte de un superior cuyo único objetivo es inhabilitarle para el cuerpo de policía debido al desequilibrio que considera que tiene, y que generalmente, no puede controlar.

En definitiva, “Luther” es un drama psicológico policial de gran calidad, indispensable para los que les guste este tipo de género entre los que me incluyo, ya que disfrutarán adentrándose en las mentes brillantes y retorcidas de los asesinos, su forma de proceder y lo que les impulsa a cometer auténticas barbaries. La serie es rápida de ver ya que sólo consta de seis episodios, pero debido al gran éxito que tuvo, ya se preparan dos episodios más, cada uno de 2 horas de duración, para el próximo año. Sin duda alguna, este año la BBC ha apostado por los detectives y ha obtenido su merecido éxito.