Esta noche TVE vuelve con Néboa, capítulo 7. Recordemos que la serie comenzaba en la primera noche de carnaval en la isla homónima, cuando aparece el cuerpo sin vida de una adolescente en O Burato do Demo, un lugar repleto de leyendas. En ese mismo sitio ya habían aparecido cuerpos asesinados de la misma manera, uno en 1919 y otro el 1989. En ambos años, el hallazgo del cuerpo fue el inicio de una serie de otros cinco asesinatos durante las fiestas de Carnaval. Ninguno de ellos se llegó a resolver.
En el capítulo anterior, Alejandro y Gonzalo eran los principales sospechosos de la Guardia Civil. Entonces, Mónica y Carmela intentaban descubrir cuál de los dos sospechosos era el verdadero Urco. A pesar de que destapar quién es el asesino que está atemorizando a toda la isla era la prioridad de Mónica, le surgieron más problemas. Tras encontrar a su hija con Emilio, no quería perderle de vista ni un segundo.
Además, los Ulloa estaban devastados por la detención de Alejandro. Sin embargo, mientras que asistían a un homenaje a las víctimas del 89 en la Iglesia, Mara recibía un aviso. Los agentes de la UCO estaban revisando las cuentas de la conservera.
Mientras tanto, Antón seguía dándole vueltas a lo que le dijo Roque durante su secuestro: Rosa mantenía una relación con Alejandro, algo que trataba de confirmar, aunque le costara su matrimonio. Mientras tanto, se anunciaba niebla por la noche y Néboa temía que todavía quedara lo peor. Quedaban tres días de carnaval y faltaban dos muertos para que se cumpliera la leyenda.
Néboa – Capítulo 7
Esta noche veremos el penúltimo episodio de la serie con todo Néboa en estado de conmoción. La hija de la teniente Ortiz, Vega, se convierte en la cuarta víctima del Urco. Este asesinato ha sido un golpe muy duro para Mónica, lo que le lleva a abandonar la investigación en pro de la sargento Souto, su aliada en la isla. Esta última mantiene a Gonzalo como principal sospechoso.
Mientras tanto, la Guardia Civil espera el informe de la autopsia de Vega y los efectivos preparan el traslado del cura al continente para comparecer ante el juez. Los vecinos no tardan en enterarse y harán todo lo posible para que Gonzalo no sea capaz de abandonar la isla. Mónica, a espaldas de Comandancia, realizará una investigación paralela para descubrir al asesino y poder vengar a su hija. Su primer objetivo: escuchar la cinta número nueve.