En Néboa, capítulo 2, como era de esperar, el Urco ha vuelto a actuar en la isla y esta vez se ha cebado sobre el teniente Ferro. Este hecho ha dejado totalmente conmocionados a todos los vecinos y a sus compañeros de trabajo dentro del cuerpo. Las investigadoras de la Guardia Civil, Mónica y Carmela tienen que trabajar duro para averiguar por qué su compañero ha sido el segundo asesinado antes de que haya una tercera muerte.
Como sucedió en el primer caso, la puesta en escena del asesinato de Ferro es exactamente igual, salvo por una diferencia: la máscara lleva escrito el número dos. Mónica está convencida de que Urco se esconde entre la niebla y decide desplegar a sus efectivos mientras que Mario debe enfrentarse a otro duro interrogatorio.
Además, en Néboa, capítulo 2 Mario no se atreve a contar toda la verdad, algo que Mónica intuye. Además, Rosa duda de la versión de Antón y de los motivos por los que no respondió la llamada de su hija. Otro de los personajes, Roque, tiene miedo de que el acosador finalmente cumpla su amenaza y desvele la relación que tenía con Ana.