¡Esta noche nos espera Perdida, capítulo 7! La última apuesta televisiva en pleno prime time de Antena 3 está protagonizada por Daniel Grao y narra la vida de una familia que busca desesperadamente a su hija, secuestrada en la playa valenciana. Recordemos que la serie aborda al mismo tiempo dos líneas temporales, el pasado que nos remonta diez años atrás y un presente tan incierto como escalofriante.
En el capítulo anterior, vimos cómo Milena mandaba a España a un sicario llamado Zarko, para eliminar cualquier cabo suelto que permitiera avanzar en la investigación sobre la desaparición de Soledad. Jaramillo fue el primero de todos en recibir la letal visita de Zarko.
Mientras tanto, Sebastián, que llevaba tiempo investigando con la policía colombiana las actividades delictivas de Quitombo, encontraba por fin el talón de Aquiles de todo lo que rodeaba al narco: su abogada Angelita.
Vimos también cómo después del fallido ataque contra Cruz en la cárcel, los españoles contaban sus bajas. A pesar de que Antonio y Enrique salieran indemnes, eran objeto de las sospechas de sus compañeros. El revuelo en la prisión era tal, que la noticia del ataque se hizo pública y se decretaba la incomunicación de los presos con el exterior, lo que conllevaba que ni Inma ni Angelita lograran saber si Antonio seguía vivo.
Perdida – capítulo 7 – La fuga
En el capítulo de esta noche veremos que después de la revuelta acontecida en la prisión la víspera de las visitas, los familiares de los presos se concentran en la cárcel para conseguir saber qué está pasando con sus seres queridos. Inma, que sigue sin saber si Antonio está vivo o no, está desesperada por la incertidumbre.
Mientras esto sucede, veremos cómo Soledad sigue empeñada en conseguir saber su verdadera identidad. La investigación da sus frutos al conseguir un documentos que va a lograr cambiar todo. Descubre, por fin, que en realidad es adoptada. La ira recorre todo su ser y estalla contra Quitombo y Milena.
¡No te pierdas esta noche Perdida, capítulo 7!