«The Event», conspiraciones a gran escala.

Desde que finalizó “Lost” han sido muchas las series que han querido coger su testigo argumental en lo que a enigmas y misterios se refiere, pero hasta la fecha, ese preciado legado se ha ido quedando en simples reclamos promocionales ya que, a la hora de la verdad, ninguna de las candidatas resultó tener unos niveles mínimos de calidad. Ahora, tras el sonado fracaso de “Flashforwad”, es el turno para “The Event” (NBC) una serie, que tras seis episodios emitidos, se ha consolidado como un proyecto serio y de calidad. A continuación mis impresiones.

“The Event” nos narra la historia de Sean Walker (Jason Ritter), un joven que se ve envuelto en una trama conspiratoria desde el mismo instante en que su novia Leila (Sarah Roemer) es raptada mientras disfrutaban de unos días de vacaciones. Con el único objetivo encontrarla sana y salva, Sean iniciará una investigación que acabará rebelando una de las mayores conspiraciones de los EEUU, en las que se verán envueltos un sin fin de personas interrelacionadas unas con otras, y entre las que se encuentra el mismísimo presidente de los EEUU y una misteriosa mujer, Sophia Maguire, líder de un grupo de 97 individuos recluidos y ocultados en Inostranka (Alaska) por el gobierno desde hace más de 60 años. Todo se precipita a raíz de un atentado frustrado contra la vida del presidente y del que Sophia parece conocer más detalles al respecto.

El argumento de “The Event” tiene una buena base para empezar una historia compleja, interesante y que pueda sorprender. La acción concretamente nos sitúa en dos subtramas, por un lado tenemos a Sean buscando desesperadamente a su chica, y por el otro al gobierno tratando el asunto de Sophia y los cautivos en Inostranka. En ambas la acción es constante, el ritmo no decae y se tiene la sensación de que realmente “pasan cosas”, algo indispensable en este tipo de series para que no caigan en el aburrimiento. Otro aspecto favorable en “The Event” son sus finales de episodios, realmente sorprendentes acompañados por excelentes efectos especiales con el único objetivo de conseguir dejar al espectador intrigado por el devenir de la trama, objetivo que en la mayoría de casos cumple sobradamente.

Como no podía ser de otra forma, el episodio piloto fue un claro ejemplo de esto último, con un final que hubiesen firmado hasta los mismísimos responsables de series como “Lost” o “Fringe”. “The Event” es una serie que, de entrada, no engaña ya que el espectador tras visualizar el final puede imaginarse claramente el tono que va a adquirir la serie, algo que se agradece y que evita, por el momento, posibles recursos fáciles con el guión. En dicho piloto también estuvieron presente una especie “flashbacks” que no me acabaron de convencer, ya que contaban una misma situación vista desde diferentes ángulos según los personajes que interactuaran en dichas situaciones, como digo, resultaba un poco rocambolesco y a decir verdad, en los siguientes episodios prácticamente desaparecen, para dar paso, a los “flashbacks” que todos conocemos y que  aparecen de manera puntual.

En lo que a personajes se refiere, todos ellos están bastante trabajados y muy bien definidos. Sean, el protagonista principal, es intrépido y cumple en su gran mayoría los estandartes necesarios para llevar el peso de una serie de estas características, aunque personalmente dude bastante del nivel de carisma que pueda llegar a lograr con el público en general. También destacaría el papel de la misteriosa Sophia (Laura Innes), un personaje que en los seis episodios ya emitidos se nos ha presentado con un hermetismo total y que resultará clave en la resolución de las incógnitas de la serie. Quizás el que más flojee es el de Elías Martínez, el presidente, ya que no acaba de convencerme en las situaciones donde muestra su lado menos diplomático, aspecto que si consigue su asesor personal, Blake Sterling (Zeljko Ivanek), un personaje con un comportamiento más que dudoso y que no invita para nada a la confianza.

“The Event” no es “Lost” ni lo va a conseguir ser, a decir verdad y salvando las distancias, la veo más cercana a “24” en lo que se refiere a la acción y sobretodo por el hilo argumental del que dispone con el presidente y su séquito, eso si, con un trasfondo bastante más impactante y enigmático que la célebre serie de Jack Bauer. La serie es muy recomendable ya que mantiene un nivel considerable de calidad en todos los aspectos y además, dispone de una trama muy interesante y llena de sorpresas. Así pues, es de prever que a medida que vaya avanzando la serie, el nivel de calidad vaya también en aumento. La primera temporada consta de 13 episodios y la cadena NBC ya ha confirmado una segunda temporada para el 2011. Esperemos pues que los responsables cuiden al máximo el evento que tienen entre manos para que no acaben con un apagón general digno de “Flashforwad”.