«Vivir sin permiso» es una serie en la que podemos ver, como hemos visto en capítulos anteriores, cualquier cosa. Y eso vemos en este capítulo 8, cosas inesperadas completamente. Así, nos encontramos con que los intereses de determinadas personas pueden estar por encima de cualquier cosa, incluso por encima de la familia, y es la cara que nos enseña Nemo Bandeira esta vez.
A esta inesperada traición familiar, sumamos un descubrimiento de cara a los medios y lo que será una gran boda. Además, se nos deja claro que, a pesar de que los círculos de Bandeira se van reduciendo, el protagonista aún sabe cómo defenderse.
El capítulo 8 de «Vivir sin permiso» ha dado de sí tanto o más como esperábamos.
Esta semana la comenzábamos con un anuncio completamente inesperado para todos: la hija de Bandeira, Nina, y Mario Mendoza, anuncian que, oficialmente, contraerán matrimonio. Esta noticia hace las delicias a nuestro cabecilla, pues Mendoza ha sido siempre considerado, desde su nacimiento, uno más en su familia.
Pero… ¿Quién pensaba a estas alturas que realmente podría llegar la paz a la vida de Nemo Bandeira? Y menos después de que Carlos descubra el origen de la fortuna que poseía su padre, quien no duda en recriminárselo. Nuestro protagonista no es capaz de esquivar las pruebas que Carlos le deja sobre la mesa, y admite todo, no sin poner por delante a su familia.
Por su parte, Monterroso parece que está consiguiendo lo que se propuso al llegar a Oeste. La familia de Bandeira recibe un grave mazazo por su parte cuando decide convocar una rueda de prensa para descubrir todo el imperio de nuestro protagonista, relacionándole con el narcotráfico directamente. Con el objetivo de limpiar su imagen, Nemo utiliza la misma jugada pero metiendo a su familia: sacrifica a su hijo Carlos y expone su problema con las drogas para así probar que no tiene relación ninguna con las acusaciones que Monterroso hizo públicas anteriormente.
Ver online el capítulo 8 de «Vivir sin permiso»
El capítulo 8 de «Vivir sin permiso» se complica cuando vemos que la situación de Nemo Bandeira es cada vez peor mientras que Mario Mendoza escala paso a paso hacia esa cima que él cree robada.
